- Adopta el inglés como lengua de trabajo
La realidad es que, en este ámbito, la gran mayoría de las traducciones parten del inglés. Y te preguntarás: ¿más que del japonés? Pues la respuesta es sí y, principalmente, tiene su explicación en el coste en términos económicos y de tiempo. Es más barato y más sencillo contratar a un traductor de inglés a español que a uno de japonés a español. Por ello, si la versión original del videojuego es asiática, lo habitual es que se traduzca primero al inglés estadounidenses y, posteriormente, a los principales idiomas europeos. Por supuesto que el japonés también tiene mercado, pero te resultará algo más difícil abrirte hueco.
- Sé creativo
Si hay un denominador común en el mundo del entretenimiento, ese es la creatividad. Si, por ejemplo, tienes que traducir un videojuego de temática medieval, como The Elder Scrolls V: Skyrim, te encontrarás con armas de todo tipo a las que deberás darle nombre, mientras que si es un videojuego de plataformas, como Mario Bros., el lenguaje será más infantil y, seguramente, incluirá chistes y comentarios graciosos. Un buen localizador es capaz de crear textos únicos con la sola ayuda de su imaginación.
- Sé fiel a la cultura meta
Hablamos de localización de videojuegos y no de traducción de videojuegos porque la figura del localizador va más allá de la «mera» traducción. El localizador de videojuegos debe adaptar el texto a la cultura meta (nombres, expresiones coloquiales, referencias culturales, etc.), aunque ello suponga «traicionar» el texto original para que la traducción no se vea contaminada. Esa adaptación es la que hace que los jugadores se sientan identificados con los personajes de los videojuegos. Es la herramienta de fusión entre un producto y el mercado local.
- Familiarízate con los aspectos técnicos
Cuando se localiza un videojuego no se traduce únicamente el juego en sí, sino también el manual de instrucciones o cualquier otra instrucción escrita (p. ej., en el embalaje). Además, en este tipo de traducción, el límite de caracteres y el uso de variables y códigos dentro del texto suponen todo un reto para el localizador. La buena noticia es que la oferta de cursos sobre localización de software es dinámica y está en constante crecimiento. Si adquieres los conocimientos necesarios, no te resultará complicado hacer frente a los desafíos técnicos de la localización de videojuegos. Y en lo que respecta a la limitación de caracteres... tendrás que ser lo suficientemente creativo para encontrar la manera de decir lo mismo con distintas palabras.
Y, para terminar, ahí va el consejo que más te va a gustar: ¡juega todo lo que puedas! Lo más divertido de la localización de videojuegos es que una muy buena manera de aprender es jugar a distintos tipos de juegos (acción, rol, estrategia...), lo cual te ayudará a hacerte una idea del lenguaje que puede encontrarse en un videojuego y de los problemas que pueden surgir durante el proceso de trabajo. ¡Dale duro!
Escrito por Ana Gutiérrez González