La interpretación social o interpretación en los servicios públicos es un género de interpretación que tiene lugar entre personas que no hablan ni comprenden el idioma oficial de un país (principalmente, inmigrantes o refugiados) y los servicios públicos de dicho país (sanidad, servicios sociales, Administración de la Justicia, etc.). El objetivo es, por tanto, facilitar el acceso a los servicios públicos a aquellas personas que no dominan la lengua mayoritaria del lugar.
La interpretación social adquiere mayor importancia en aquellos países que reportan cifras significativas de extranjeros. Tal es el caso de España, donde, por primera vez en seis años, la población extranjera ha vuelto a superar el 10 % de la población total. La mayor parte de esta inmigración procedió de países no pertenecientes a la Unión Europea. Se trata, por tanto, de personas que probablemente pertenecen a minorías nacionales.
Desde Pafelingua, como especialistas en la traducción e interpretación de lenguas minoritarias, queremos esbozar algunos de los rasgos de los servicios de interpretación social que tan necesarios son en estos casos.
- La principal diferencia entre la interpretación en los servicios públicos y otros géneros, como la interpretación de conferencias, es que la primera es intrasocial. Es decir, las personas que requieren este servicio hablan en su propio nombre y no forman parte de ninguna delegación internacional.
- Por otra parte, como ya he comentado brevemente, las lenguas más empleadas en este tipo de interpretación no suelen ser los principales idiomas mundiales, sino idiomas o dialectos de menor difusión. Esto es especialmente relevante, ya que también suelen proceder de culturas muy diferentes a la nuestra. En este sentido, es fundamental que el intérprete social tenga en cuenta todos los aspectos que pueden dificultar la comunicación (actitudes, relaciones sociales, etc.) y se esfuerce por salvar la brecha cultural entre las partes.
- Otra gran diferencia entre la interpretación social y otros servicios de interpretación es la forma. La interpretación en los servicios públicos casi siempre tiene lugar en forma de entrevista. No se trata de un monólogo ni de un discurso. El intérprete tiene la misión de favorecer el establecimiento de una conversación entre los participantes y crear una relación (médico-paciente, juez-imputado, etc.) que irá evolucionando sobre la marcha.
Todo lo anterior conlleva no pocos retos para el intérprete, aunque a priori la interpretación bilateral pueda parecer la más sencilla. Por ello, desde Pafelingua, queremos aprovechar este artículo para reconocer la labor de los intérpretes sociales, gracias a los cuales es posible garantizar el acceso a los servicios públicos para todos, en igualdad de condiciones, y que las administraciones públicas cumplan con su obligación de atender de manera profesional a toda la sociedad.
Escrito por Ana Gutiérrez González