Sea como fuere, la globalización, los medios de comunicación e Internet han llevado la festividad de Halloween a países donde tradicionalmente nunca se había celebrado. Pero ¿conoces el origen de este día?
En la Irlanda de los druidas, estos rendían homenaje a la muerte cada 31 de octubre, día en el que tenía lugar la fiesta de Samhain, que coincidía con el fin del verano y servía como celebración del final de la temporada de cosechas. El caso es que los celtas de Irlanda, Inglaterra y otros países del norte de Europa tenían la creencia firme de que esa noche los espíritus salían a pasear y, dado que no todos eran buenos, había que dejar ofrendas y regalos fuera de las casas para que el mal no afectara a las cosechas del año venidero.
Sin embargo, con el paso de los siglos y la expansión del cristianismo, el vocablo celta dio paso a la expresión inglesa «All hallow’s eve» y su posterior contracción «Halloween» (cuya traducción literal es «víspera de todos los Santos»). Así, la tradición pagana adquirió un nuevo sentido religioso, aunque hay que reconocer que, actualmente, los disfraces, las fiestas y los adornos imperan sobre el sentido original de la festividad de la víspera de Todos los Santos.
La traducción de «truco o trato»
Como decía, con el paso de los años, esa superstición celta ha adquirido un tono festivo e infantil, y ahora los niños corren de puerta en puerta gritando eso de «trick or treat?» («¿truco o trato?»). Lo hemos visto en series como New Girl, Sensación de Vivir o Friends, pero lo que quizás no sabes es que esta expresión se debe a un error de traducción, difundido precisamente por el medio audiovisual.
El término «trick» hace referencia a la travesura que los niños «amenazan» con hacer si no reciben un «treat», es decir, un regalo (normalmente, dulces o golosinas). Por tanto, el «trick-or-treating» no consiste en un truco propiamente dicho, sino más bien en un susto, una trastada o una broma. Tampoco el objetivo es establecer un trato, sino que se pide un obsequio, una sorpresa. Así, una traducción más ajustada a su sentido sería, «dulce o travesura», «susto o dulce» o «susto o golosina», aunque se perdiera el juego fonético del original.
Ahora que ya has aprendido algo nuevo, solo te queda ponerte tus mejores galas y salir a disfrutar de una de las fiestas más internacionales del mundo. Si estás en Cataluña o en el País Vasco, también puedes celebrar la Castanyada o el Gaztainerre, con la castaña como invitada destacada. Estés donde estés, desde Pafelingua te deseamos ¡feliz Halloween!