En el artículo anterior pusimos de relieve los cambios que había sufrido el sector de la traducción profesional desde que, hace algo más de un año, la pandemia de la covid-19 provocara un estado de alarma en todo el mundo. Pero los traductores no son los únicos que han visto afectada su actividad. La vida de los intérpretes profesionales, sus compañeros de gremio, también ha cambiado mucho.
El 14 de marzo de 2020 se declaraba el estado de alarma en todo el territorio nacional para contener la propagación de infecciones causadas por el SARS-CoV-2. Hace un año, el mundo cambió. Lo que antes era normal ahora nos parece extraordinario. Desde entonces, se han destruido dos millones de empleos, la crisis se ha llevado por delante más de doscientas mil empresas y más de trescientos mil autónomos, y la llegada de turistas extranjeros a España se ha hundido un 89,5 %. Unos en mayor medida que otros, pero todos los sectores económicos han sufrido el impacto de las restricciones exigidas para enfrentar la propagación de la COVID-19. También el de la traducción profesional.
Cada ocho de marzo se celebra en muchos países (incluso en algunos es fiesta nacional) el Día Internacional de la Mujer, un día para luchar por la igualdad, la participación y el empoderamiento de la mujer en todos los ámbitos de la sociedad y también para reivindicar los derechos básicos en los países menos desarrollados en aras de una igualdad de género efectiva. Desde luego, si hay un colectivo que sabe de lucha, es el de las mujeres. Solo hay que echar la vista atrás para comprobar todo lo que se ha avanzado en los últimos cien años, pero aún queda mucho camino por recorrer…
El número de solicitudes de patentes se incrementa cada año, lo cual supone una demanda creciente de traductores especializados en este género. Solo en 2018 se solicitaron 4.287 invenciones (1.578 patentes y 2.700 modelos de utilidad). Sin embargo, la traducción técnica de patentes exige un altísimo grado de especialización y no todos los profesionales están preparados para afrontar un encargo de estas características. De ahí la importancia de dejar esta tarea en manos de verdaderos profesionales.
Desde que hace ya once meses se decretara el confinamiento general, muchos negocios se han visto forzados a crear tiendas online y traducir sus comercios electrónicos como única solución para reflotar las ventas y encontrar nuevos clientes. Frente a un virus que exige distanciamiento social y que seguirá estando aquí en mayor o menor medida, la única salida es la digitalización. De hecho, en 2020, el e-commerce en España creció más de un 20%, y de forma importante en los sectores de la moda, la televisión por suscripción, la alimentación y los electrodomésticos. Por ello, en Pafelingua hemos querido explicar en este artículo algunos puntos a los que conviene prestar atención antes de internacionalizar un proyecto de comercio electrónico.
El doce de febrero, coincidiendo con la segunda luna nueva después del solsticio de invierno, se celebra en todo el mundo el Año Nuevo Chino. Y sí. Decimos en todo el mundo porque esta festividad no solo tiene gran tradición en China, sino también en otros países del este de Asia, como Singapur, Vietnam o Corea del Sur, y por supuesto, se celebra en los barrios chinos de todos los continentes. De acuerdo con el horóscopo chino, este será el año Año del Buey de Oro, un periodo marcado por el orden, la disciplina, el esfuerzo, el trabajo y la familia.